Mira la flor, su color, siente su perfume, están hechas para ti.
Es un regalo de Dios para ti.
Si sublimemente la contemplas te hará ver lo que te pierdes en el día, te hará ver las Maravillas que Dios hizo para ti, con el conocimiento del Amor sentirás la esencia sublime de Dios.
Despierta al mundo que Dios puso para ti y deja el mundo creado, la ilusión, para que no mires lo bello, lo real que tienes en la Inmensidad.
Contempla, estarás contemplando la Creación a través de ti.