Es el momento de mirar al Sol en tu amanecer
y darte cuenta que esa Luz todos los días la tienes en ti.
Luz para que te reencuentres día con día
con la misión de despertar la Esencia de Dios-Luz que tienes en ti.
Hoy es el momento de brillar y decir:
“Soy Luz y me manifiesto como tal,
iluminando mi vida y mi camino,
iluminando mi entorno y mis ciclos.
Hoy ilumino, mañana iluminaré y siempre lo haré,
por que estoy hecho de Dios.
Dios es Luz y Yo lo Soy también.”